La última práctica del mes de febrero, ha consistido en la realización de un cuestionario que versaba sobre los conocimientos informáticos de los alumnos de Magisterio de varias especialidades. Una vez realizado el cuestionario, he descubierto que la mayoría de los términos empleados no me son desconocidos, ya que son términos que manejando la informática a nivel de usuario vas descubriendo poco a poco. El problema radica en la velocidad con que se crean nuevos conocimientos y funciones a utilizar con las nuevas tecnologías y puedes quedarte atrasada muy rápidamente, aunque en la misma red puedes encontrar información para seguir al día.
Competencia Digital.
Los legisladores educativos deben enmarcar en sus normas la realidad social, las necesidades y capacidades que deben alcanzar los individuos. Integrar la competencia digital en el currículo de Educación Primaria es un acierto, ya que las nuevas tecnologías rodean al alumno en su vida cotidiana, por lo que debe aprender sus potencialidades, su manejo, organizar y analizar la información extraída, convertirla en conocimiento e integrarla en sus aprendizajes, poniéndolos en relación con distintos tipos de contenidos, utilizándolos de manera efectiva. Estos procesos requieren del uso de distintas estrategias que van desde el aprendizaje de los elementos más técnicos (software, hardware...) hasta el dominio de distintos lenguajes, necesarios para comunicar la información procesada.
Alcanzar esta competencia significa ser una persona autónoma, eficaz, responsable, crítica y reflexiva al seleccionar, tratar y utilizar la información y sus fuentes, así como las distintas herramientas tecnológicas; también tener una actitud critica y reflexiva en la valoración de la información disponible, contrastándola cuando es necesario, y respetar las normas de conducta acordadas socialmente para regular el uso de la información y sus fuentes en los distintos soportes.
